“PASTEL CREMOSO DE MAMÁ QUE FUNCIONA SIEMPRE…”

1. Bate las claras de huevo hasta que estén a punto de nieve. Luego, agrega una cucharada de azúcar a la vez mientras sigues batiendo. Después, incorpora la harina.
2. Vierte la mezcla en un molde previamente engrasado, de aproximadamente 26 cm de diámetro.
3. Hornea a 180 grados Celsius hasta que esté dorado.
4. Una vez que el bizcocho esté listo, retíralo del horno y, aún caliente, vierte 250 ml de leche sobre él. Luego, deja que se enfríe.

Para el relleno:

5. En una olla, calienta 500 ml de leche con 100 gramos de azúcar y agrega un pudín de vainilla mezclado con 2 cucharadas de almidón de maíz. Cocina hasta que espese y se enfríe.
6. En otra olla, calienta 500 ml de leche con 100 gramos de azúcar y agrega un pudín de chocolate mezclado con 2 cucharadas de almidón de maíz. Agrega los 40 gramos de chocolate y revuelve hasta que se derrita. Deja enfriar.
7. En un tazón aparte, bate la margarina con las 5 yemas de huevo restantes y divide la mezcla en dos partes.
8. Mezcla una parte de la margarina con el pudín de vainilla y la otra parte con el pudín de chocolate.

Armado:

9. Cubre el bizcocho empapado con la mezcla de crema de vainilla y luego con la crema de chocolate.
10. Finaliza colocando la crema batida por encima y rallando chocolate encima.

¡Disfruta de tu delicioso pastel!