FERMENTA COL KALE EN UN TARRO SIN VERTER: Con este método, nunca se me desmorona

1. Lava y enjuaga bien las hojas de col kale.
2. Corta las hojas de col kale en trozos del tamaño que prefieras.
3. En un tazón grande, agrega la sal marina y las hojas de col kale cortadas.
4. Masajea suavemente las hojas de col kale con la sal durante unos minutos. Esto ayudará a que la col kale libere líquido y se ablande.
5. Una vez que las hojas de col kale hayan reducido su volumen y estén más suaves, colócalas en un tarro de vidrio limpio y esterilizado.
6. Presiona las hojas de col kale hacia abajo en el tarro para que queden bien compactas. Deja espacio en la parte superior del tarro.
7. Si es necesario, añade un poco de agua para asegurarte de que las hojas estén completamente sumergidas en su propio jugo.
8. Coloca una tapa en el tarro, pero no la cierres herméticamente. Puedes usar una tapa con cierre de rosca o un paño sujeto con una banda elástica para permitir que los gases de la fermentación escapen.
9. Deja el tarro en un lugar oscuro y a temperatura ambiente durante varios días (generalmente de 3 a 7 días, dependiendo de tus preferencias). Durante este tiempo, la col kale fermentará y desarrollará un sabor ácido.
10. Después de la fermentación, cierra herméticamente el tarro y guárdalo en el refrigerador.

¡Listo! Ahora tienes col kale fermentada y deliciosa que no se desmorona. Puedes disfrutarla como acompañamiento o en ensaladas. Recuerda que la fermentación puede variar en tiempo según la temperatura ambiente, así que prueba la col kale fermentada para determinar cuándo tiene el sabor deseado.